Pobre chaval, ¿habrá que glorificarlo?

Hoy me ha dado por reflexionar, que pena tener que despedirse del mundo de esta forma, joven y con mucha vida por delante. Antonio Puerta, jugador de fútbol del Sevilla, ha fallecido debido a una malformación congénita en su corazón, es una pena que se haya muerto en las circunstancias que ha ocurrido todo pero ya vale de prensa morbosa. Me explico, estamos de acuerdo en que cuando muere una persona pública la obligación de la prensa es informar del fallecimiento de esta, pero el caso de Puerta está llegando a la glorificación de la persona. Ayer, todas las cadenas de TV abrieron y cerraron los informativos con la muerte del jugador, ¿no os parece un poco excesivo?, el mismo día murió Umbral y no se ha dedicado tanto tiempo a su muerte, Umbral escritor y filosofo de renombre, con un historial como columnista envidiable, y apenas se habló de su fallecimiento, esto nos dice de un plumazo en que país vivimos. Un país que está lleno de incultura y de personas que cada vez quieren y desean ser más incultos. Cada uno que piense en que grupo está y después que elija (si sigues pensando lo mismo después de esto eres un caso perdido, sigue leyendo mierda).

Esta crítica no es en contra del chaval, es en contra de todos aquellos que glorifican su persona cuando lo único que ha hecho es realizar bien su trabajo, y a los demás que han muerto ¿por qué no se les ha dado tanto bombo?, ya no solo hablamos de Umbral, que seguramente su familia lo eche de menos pero tenía pelas (esto siempre calma el dolor, sobre todo el de los carroñeros), hablamos de los dos currelas que murieron ayer también en sus trabajos, uno en las obras del AVE y otro en la construcción en Madrid, hablamos de todos los muertos que han aparecido en Perú después del terremoto, esto si que son noticias de verdad y por lo que se debería preocupar la gente.

Es cierto, pobre chaval, pero los demás también existimos en este mundo. Piensa por quién merece la pena llorar y no hagamos un nuevo dios a cualquiera.

Descanse en paz.

La vuelta al cole

Otra vez a la puta rutina de siempre, otra vez a empezar como todos los años, el principio siempre es duro, ya lo sabemos de todos los años, pero aun así la crisis mental que tienes los primeros días no te los quita ni dios.

Me he puesto a recordar todo lo que he hecho estas vacaciones y si señores cada día que pasa soy más alcohólico que el día antes. Que decir de la maravillosa semana que pase en Roma con mis amigotes de toda la vida, semana trepidante, vivida intensamente, acostándonos tarde y madrugando para hacernos pasar por culturetas entre los romanos. En los siete días que pasamos en esta ciudad no pasamos sed, mejor no mentiré, en ocasiones si que la pasamos pero fue por el intenso calor que hacía, esto nos obligó a beber a todas las horas todo tipo de líquidos, desde el clásico agua de fuente a la cervecita, limoncello,... que pedal a esto último. Puestos a sacar conclusiones de este viaje diré lo siguiente:

En Roma no hay tías feas, si señores, parece exagerado pero no lo es, tendrían que aprender las mujeres españolas de como se viste a diario. Sin exagerar, podrías ir a un supermercado y ponerte burro con la cajera (igualito que en Spain). Vamos que están a años luz en este aspecto.

En Roma la cerveza está caliente, la cerveza es caliente, bueno caliente del todo no, del tiempo, pero para un español corriente es caliente.

En Roma todo está roto, esto es así y ya está (todo manga por hombro).

En Roma no hay hielo, si amigos toda una odisea para conseguirlo, si lo pides en un bar te miran raro, nada lleva hielo allí.

Allí hay higueras, columnas y motos por todas las partes y todo el mundo es guay, los trenes y el transporte son una mierda en general y nadie paga por montar en ellos, y más cosas que no recuerdo. Por cierto, si mezclas coca cola y vino te mirán raro.

Después de este viaje trepidante pase una semanita en el pueblo de mi viejo, allí todo como siempre, beber, beber y beber, bueno algún día no bebí mucho. Por allí todo trascurrió como de costumbre, aunque quizás entre semana este año haya habido menos peña, la gente trabaja y los que no con el tema de los exámenes solamente van los findes. Nada que cada vez me distancio más de la gente de siempre y cada vez quiero más a otros de siempre (cada uno que piense en el grupo que está).

Además del pueblo, mini tour por Galizia viendo a mis primos y tíos y nada más.

Hoy la vuelta al cole, estoy jodido y siento morriña de las vacaciones y me encuentro mal por no estar con mi gente pasándolo bien, esto va a ser duro.